EL PERIODO DE INDUSTRIALIZACIÓN
En la década de 1930, el estancamiento de la actividad agropecuaria se hizo más evidente, mientras la actividad industrial adquiría cada vez mayor importancia. Estos cambios se vincularon con las transformaciones del contexto mundial y, con el mercado externo. Después de la crisis de 1930, el mercado internacional estaba paralizado, y había disminuido la oferta de productos manufacturados y la demanda de productos primarios. La sociedad argentina, tuvo que desarrollar nuevas estrategias para evitar la caída de sus actividades productivas. Surgieron nuevos proyectos y acciones desde diferentes sectores de la sociedad. A este conjunto de proyectos y acciones se lo suelen denominar modelo de sustitución de importaciones.
LAS ACCIONES DEL ESTADO
En 1930, los asuntos económicos por medio de acciones tendientes a fortalecer el mercado interno como principal generador de la oferta y demanda de bienes, y al desarrollo de la industria como actividad productividad básica. Se pueden mencionar:
La regulación de las exportaciones y las importaciones de mercancías.
La participación de empresas estatales proveedoras de servicios.
La realización de grandes inversiones en obras públicas para mejorar la infraestructura.
La construcción de grandes empresas de producción de energía eléctrica, las áreas del norte y el oeste con escasez de agua.
El estado desempeño un rol importante como generador de empleo, no solo por las obras publicas sino también por la oferta de los puestos de trabajo en las empresas y en la administración pública. Por este conjunto de acciones destinadas a mejorar las condiciones de vida de la población, se suelen considerar al Estado de esta etapa como un Estado de bienestar.
EL DESARROLLO INDUSTRIAL
Durante este periodo se formaron empresas pequeñas y medianas, con predominio de capitales nacionales.
En los primeros años, se volcaron a las industrias productoras de bienes de consumo. Las firmas ubicaron sus fábricas en las ciudades más grandes.
A fines de la década de 1950, las empresas industriales se encontraron con un retraso tecnológico con respecto a los países desarrollo y con dificultades para acceder a algunas materias primas industriales. Se procuró avanzar en la producción nacional de maquinarias y equipos para ampliar la capacidad productiva y asegurar un mayor desarrollo. Se requerían capitales, que fueron aportados por grandes empresas extranjeras, que se habían instalado en nuestro país al amparo de una nueva legislación de radicación de capitales. El crecimiento industrial de los años 60 se debió, al incremento de la producción petrolera, siderúrgica, de productos químicos y de automóviles.
El Área Metropolitana de Buenos Aires se consolido como el papel mercado consumidor y concentro la mayor cantidad y variedad de industrias y servicios.
El área pampeana destino parte de su producción al mercado interno.
Las regiones extrapampeanas, también denominadas economías regionales. Estas economías se caracterizaron por un desarrollo menor, con la excepción de la Patagonia, que tuvo gran impulso por el crecimiento de la producción de petróleo y de gas.
Otra característica de esta etapa es la importancia que adquirió la administración pública como principal fuente de trabajo.
Después de la década de 1970 comenzaron a producirse importantes cambios, tanto en el contexto internacional.
En el ámbito internacional, una crisis petrolera cambio las reglas y los objetivos de la economía mundial.
En el ámbito nacional, la dictadura militar que se instauro en 1976. Este gobierno favoreció una economía basada en las exportaciones de productos primarios y las importaciones de manufacturas, participación de empresas trasnacionales y la actividad financiera